La ciudad es la principal productora argentina. El programa municipal es la clave para el desarrollo pero cada vez más personas producen en sus hogares.
En Rosario aumenta la cantidad de productores de verduras y frutas orgánicas a partir de la consolidación de un programa municipal, pero también crecen los productores hogareños, de manera de posicionar a la ciudad como el punto de mayor desarrollo del país.
La principal herramienta para el desarrollo y la producción de verduras orgánicas es el Programa de Agricultura Urbana (PAU) que impulsan de manera conjunta el municipio, el INTA, el programa Pro Huerta del Ministerio de Desarrollo Social y el Centro de Estudios de Producciones Agroecológicas (Cepar).
Además, en Rosario es creciente la cantidad de productores hogareños que utilizan sus tierras para ese fin y después comercializan sus producciones en las diferentes ferias que se organizan en toda la ciudad, a un precio más competitivo que el que se consigue en verdulerías.
La clave para el desarrollo de la agricultura urbana es la baja inversión inicial. En términos básicos, únicamente hay que disponer de una porción de tierra y las semillas. Las producciones se hacen cada vez con métodos más completos, de manera que es necesario implementar sistemas de riego y separación de las producciones.
Alrededor del 5 por ciento de la población rosarina está vinculada a la producción de verduras orgánicas y la ciudad es la de mayor cantidad de productores entre las urbenes argentinas de más de 300 mil habitantes, según estadísticas extraoficiales.
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