Por Impulso

CONTENIDO NO EDITORIAL. Los operadores del día dependen en gran medida de las fluctuaciones de las acciones o del mercado para obtener sus beneficios. Sea cual sea la estrategia que utilicen, buscan que la acción se mueva.

La volatilidad es el nombre del juego del day trading. Los operadores del día dependen en gran medida de las fluctuaciones de las acciones o del mercado para obtener sus beneficios. Les gustan los valores que rebotan mucho a lo largo del día, sea cual sea la causa: un informe de beneficios bueno o malo, noticias positivas o negativas, o simplemente el sentimiento general del mercado. También les gustan los valores de gran liquidez, que les permiten entrar y salir de una posición sin que ello afecte mucho al precio de la acción.

Los operadores del día pueden comprar una acción si está subiendo o venderla en corto si está bajando, tratando de beneficiarse de la caída de una acción. También pueden operar con el mismo valor varias veces al día, comprando una vez y vendiendo en corto la siguiente, aprovechando los cambios de opinión. Sea cual sea la estrategia que utilicen, buscan que la acción se mueva.

Comprar con margen

Para aumentar los beneficios, muchos operadores utilizan dinero prestado para realizar sus operaciones, una práctica conocida como “comprar con margen”. Con una cuenta de margen, la proporcionan la mayoría de los Forex brokers online y puede utilizar los valores que ya posee como apalancamiento para pedir prestado hasta el 50% del valor del valor que va a comprar. Este tipo de apalancamiento puede aumentar los beneficios más allá de lo que podría conseguir con su propio efectivo, pero no está exento de riesgos significativos: sus pérdidas también se verán ampliadas.

Así es como funciona. Si quiere comprar 20.000 dólares en una acción, puede comprar 10.000 dólares en acciones y pedir prestados los otros 10.000 dólares a su empresa de broker. Si compró las acciones a 10 dólares por acción y más tarde subieron un 20% a 12 dólares por acción (y las vendió a ese precio), tendría 24.000 dólares. Después de devolver el préstamo de 10.000 dólares a la empresa de corretaje, le quedan 14.000 dólares, lo que supone un aumento del 40% respecto a los 10.000 dólares que invirtió con su propio dinero. Sin el dinero prestado, su rendimiento habría sido sólo del 20%.

Pero, ¿y si el precio de las acciones hubiera caído un 20%? Se aplican las mismas reglas, pero al revés. Si vendieras a 8 dólares por acción, sólo tendrías 16.000 dólares. Después de devolver los 10.000 dólares, te quedarías con 6.000 dólares: una pérdida del 40% de tu inversión original.

Una cosa a tener en cuenta: los ejemplos no incluyen los intereses que pagará por el préstamo de margen, pero esto también debería tenerse en cuenta.

Entonces, ¿Por qué el day trading es más difícil que la inversión pasiva?

Hay dos razones principales:

Los operadores diarios minoristas compiten con los profesionales. Los profesionales conocen los trucos y las trampas. Disponen de una tecnología de negociación muy cara, suscripciones de datos y conexiones personales. Están perfectamente equipados para tener éxito, e incluso a menudo fracasan. Entre estos profesionales se encuentran los operadores de alta frecuencia, que buscan sacar centavos o fracciones de centavos -el beneficio del operador diurno- de cada operación. Es un campo abarrotado, y a los profesionales les encanta que los inversores inexpertos se unan a la batalla. Eso les ayuda a obtener beneficios.

Los inversores minoristas son propensos a los prejuicios psicológicos que dificultan las operaciones diarias. Tienden a vender los ganadores demasiado pronto y a mantener los perdedores demasiado tiempo, lo que algunos llaman “recoger las flores y regar las malas hierbas”. Eso es fácil de hacer cuando se recibe una inyección de adrenalina por cerrar una operación rentable. Los inversores tienen una aversión miope a las pérdidas, lo que les hace tener demasiado miedo a comprar cuando una acción baja porque temen que pueda caer más.

También hay que tener en cuenta

Si te conviertes en un day trader de éxito, tendrás que pagar impuestos sobre las ganancias a corto plazo a tu tipo impositivo marginal. La Agencia Tributaria define las ganancias netas a corto plazo como aquellas procedentes de cualquier inversión que mantenga durante un año o menos. Sin embargo, puede compensar las ganancias con las pérdidas de las operaciones.

Imágenes: Gentileza

Tags: day trading economía inversion inversión pasiva operadores



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