Impulso

Debido al crecimiento del parque automotor y la falta de lugares para el estacionamiento, la comercialización de cocheras se convirtió en un nicho de inversión destacado en Rosario.

El incremento del parque automotor en la ciudad es un hecho desde hace algunos años, en el marco de una situación nacional en la que se han registrado entre 2008 y 2012 récords constantes en materia de producción automotriz y venta de vehículos 0 km, en Rosario la construcción de cocheras no siguió el ritmo para poder cubrir la demanda.

El número de cocheras creció por arriba de un 120 por ciento en los últimos trece años. En 1999 había en el radio de Avenida Pellegrini, Boulevard Oroño y el río unas 152 cocheras. Para legar llegar a 313 en 2009 y a un total de 337 cocheras en el último año.

Las cifras oficiales aportadas por la Municipalidad de Rosario son sensiblemente menores a la demanda del sector. Por ello, el precio de las unidades para el cuidado de vehículos creció de manera notable.

A modo de ejemplo, según un informe privado de la Corporación de Empresas Inmobiliarias al que tuvo acceso IMPULSO, en los barrios periféricos al centro los valores de las cocheras varían entre los 13 mil y 24 mil dólares, mientras que en el área central, los valores oscilan en torno a los 30 mil dólares.

Estas situaciones que se viven en Rosario, también se generan en las grandes ciudades del interior. Como por ejemplo: Mendoza, Córdoba, Mar del Plata y Neuquen.

Promoción para la construcción de edificios de cocheras

En este marco, el concejal radical Jorge Boasso presentó un proyecto para modificar la ordenanza 812206 y extender a todas las áreas de la ciudad el Sistema de Promoción Urbanística para la Construcción de nuevos edificios de cocheras como los cuatro desarrollados y uno en ejecución en la zona del centro.

La idea es ampliar los beneficios a la iniciativa privada hacia todos los barrios, que permitan ejecutar más cocheras alentando la inversión a través de beneficios fiscales y bancarios.