Impulso

Newell’s no pudo volver a la victoria en la  Superliga Argentina. En esta oportunidad cayó como local ante Talleres de Córdoba por dos a uno, la lepra se había puesto en ventaja a través del portugués Luis Leal pero Palacios y Ortiz dieron vuelta el encuentro a favor del equipo cordobés, clave para la clasificación a la Copa Sudamericana.

El partido comenzó de la mejor manera para el rojinegro, con un Figueroa activo, un Leal mucho más cómodo jugando como extremo y no perdiendo en los mano a mano ante los defensores rivales, Cacciabue y Rivero mandando en la mitad de cancha y un equipo que en general presionaba alto y bien para obligar al error en la salida de los defensores de la “T”.

En una recuperación en mitad de cancha de Cacciabue, la pelota deriva en Alexis Rodríguez que en con dificultades la pudo dominar, abrió hacía la derecha y lo encontró a Leal que dominó, encaró y resolvió cruzado para el uno a cero a favor de la lepra. El propio portugués sacó un tiro cruzado que se estrelló en el cuerpo de Figueroa y que el arquero cordobés alcanzó a sacar al córner.

El equipo de Vojvoda era rápido de mitad de cancha hacia adelante y cuando finalizaba la primera etapa una mala salida por la izquierda leprosa, desborde y centro para que Sebastián Palacios se adelantara a la marca de los centrales para el empate transitorio. 1 a 1 y a los vestuarios.

El complemento encontró la peor cara del equipo de Bidoglio, sin presión, ni peso en el área, con errores de armado e individuales que le dieron la chance a Talleres de empezar a manejar el trámite, para colmo de males a Cacciabue se le fue la pierna en un cruce y el local se quedó con 10. Un par de minutos después Díaz lo baja a Leal y por doble amonestación se va expulsado y parecía que el partido volvía a estar al alcance de la mano.

Bíttolo salió lesionado con un esguince de tobillo y Formica salto a la cancha más allá de una inflamación en el peroné que no le permitió ser titular, las expulsiones rompieron el partido y la mitad de cancha era testigo del ida y vuelta que se armó. Ribair Rodríguez que había ingresado para sostener la pelota en mitad de cancha lo único que logró es una posición privilegiada para ver pasar a los volantes cordobeses y en una de esas ocasiones Maroni desbordó por la derecha y Ortiz solo en el punto del penal después de un par de enganches definió entre las piernas de Aguerre.

El broche negro de la tarde fue cuando el uruguayo recién ingresado pegó una patada descomunal ya amonestado y terminó expulsado para coronar una tarde para el olvido.

Preocupante derrota de Newell’s, un técnico que en dos partidos echó por tierra todo lo bueno que había hecho hasta ahora, dejó muchísimas dudas y un panorama complicado para armar el equipo en un partido complicado que se asoma contra Gimnasia, sin Cacciabue expulsado, Rivero suspendido, Rodríguez también expulsado, y un Formica que está complicado desde lo físico. Bidoglio retrocedió, las decisiones no acompañan y las dudas sobre el futuro empiezan a sonar fuerte en el Parque de la Independencia.