Tras un primer tiempo sin luces, el astro argentino frotó la lámpara en la segunda parte y abrió el camino argentino. Enzo Fernández completó el resultado.
Argentina, Messi, ilusión. El equipo de Scaloni pasó la prueba y venció por 2 a 0 a México. Tras un primer tiempo sin luces, el astro argentino frotó la lámpara en la segunda parte y abrió el camino argentino. Enzo Fernández completó el resultado.
El director técnico del seleccionado argentino, Lionel Scaloni, comenzó pateando el tablero y plantando un equipo distinto al que jugó con Arabia. Dibu Martínez, Gonzalo Montiel, Nicolás Otamendi, Lisandro Martínez y Marcos Acuña; Guido Rodríguez, Alexis Mac Allister y Rodrigo De Paul; Ángel Di María, Lionel Messi y Lautaro Martínez salieron de entrada.
El encuentro comenzó parejo, con el conjunto de Scaloni intentando imponerse desde el inicio pero con un México que no se quería resignar. Algunas pérdidas cerca del área de Martínez, junto con la presión del rival, complicaron los primeros minutos y no permitieron que el conjunto nacional se repliegue.
Entre los nervios y el planteo del conjunto del Tata, al seleccionado argentino le costó los primeros 15 minutos hacer pie y no generó peligro al arco del “Memo” Ochoa. El mediocampo estuvo poco participativo y con poca presencia.
La primera llegada de Argentina fue a los 24 minutos, con un centro de Montiel que no conectó nadie y no llevó peligro. Los de Scaloni seguían con complicaciones para tocar y no podían entrar al área mexicana.
A partir de los 30 minutos, la línea de volantes pudo jugar más adelantada y Argentina generó más llegadas pero sin mucho peligro. En la banda de Montiel y Di María, los de Scaloni encontraron la forma de tirar algún centro para Lautaro Martínez que, a pesar de cabecear, no tuvo destino de arco.
México tuvo la más clara de la primera parte a los 44 minutos, tras un tiro libre de Alexis Vega. El remate iba directo al ángulo pero Emiliano Martínez tapo el disparo de manera brillante sin dejar rebote. Por su parte, la jugada colectiva más importante de Argentina llegó a un minuto del final, con un centro de Marcos Acuña que terminó en córner.
Ya en el complemento, Argentina salió con el mismo ritmo que en los primeros 45 minutos. Sin cambios en el 11, los de Scaloni buscaron el gol mientras México se resguardó más cerca del arco de Ochoa.
La primera de peligro fue de Messi de tiro libre. Con una ubicación más que ideal, el astro argentino no tuvo puntería y le pegó por arriba del travesaño. Ya con el ingreso de Enzo Fernández, la selección buscó ser más vertical y romper el cero. Sin embargo, el equipo del Tata Martino se defendía bien y Argentina no podía llegar al área.
Cuando todo parecía cuesta arriba, apareció Lionel Messi. A los 64 minutos, el astro argentino recibió de Di María y sacó un tremendo remate de afuera del área que se clavó en el ángulo inferior del arco de Ochoa. El equipo explotó desahogado gritando junto al 10.
A partir de la ventaja, Scaloni acomodó al equipo. Julián Álvarez, Nahuel Molina, Cristian Romero y Exequiel Palacios ingresaron para darle más control al mediocampo y aguantar el resultado. A pesar de los intentos, el seleccionado mexicano no generó chances concretas de gol.
Para la tranquilidad Argentina, a los 86 minutos la selección liquidó el partido. Enzo Fernández recibió adentro del área, se acomodó y clavó un remate en el ángulo de Ochoa, para que explote el equipo y sentencie el partido con un 2 a 0.
Sin tiempo para más, los de Scaloni pusieron su autoridad y jerarquía dentro de la cancha para ganarle a México por 2 goles y demostraron que van a seguir peleando. Argentina jugó un gran segundo tiempo y se ilusiona.