La Dra. Paola Caro, especialista en emergentología brinda recomendaciones al llegar los fríos más intensos.
Ya en otoño, y de cara al invierno, es importante fortalecer el sistema inmunológico y reforzar sus defensas para protegerse del ataque de agentes externos frecuentes en estas épocas estacionales (virus, hongos y bacterias) o internos que puedan alterar la salud.
Para ello, se recomienda mantener los cuidados a los que ya la población está habituada por los cuidados contra el Covid 19, tales como lavarse las manos de forma adecuada y frecuente; evitar los lugares con aglomeraciones y ventilar las habitaciones al menos 1 vez al día.
Además, es fundamental tener una alimentación equilibrada y saludable, privilegiando una dieta rica en frutas, sobre todo cítricos y verduras, granos enteros, frutos secos y grasas saludables, que se encuentran en alimentos como pescados grasos y aceite de oliva.
Otro aspecto importante es realizar deporte al menos tres días a la semana. El ejercicio ayuda a eliminar bacterias de los pulmones y vías respiratorias, lo que podría reducir la probabilidad de contraer un resfriado, gripe u otras enfermedades. Mantener el cuerpo en movimiento hace que los anticuerpos y glóbulos blancos del cuerpo circulen con mayor rapidez, y disminuye la liberación de cortisol, también fortaleciendo las defensas. La actividad física también ayuda a bajar los niveles de estrés, aunque también esto se logra realizando alguna otra actividad que haga que la persona se sienta a gusto.
Otra recomendación para fortalecer el sistema inmune es llevar un descanso adecuado y dormir las horas suficientes para tener un sueño reparador. El sueño es uno de los reforzadores naturales del sistema inmune más efectivos y fáciles de conseguir, ¡solo necesitamos dormir! Cuando se priva al cuerpo de un sueño de calidad, éste produce hormonas de estrés como cortisol para mantenerse despierto y alerta, lo que debilita el sistema inmune, favoreciendo resfriados e infecciones respiratorias.
Para los días fríos se aconseja cubrir boca y nariz para entibiar el aire y no generar daño en la mucosa de la garganta porque esa zona regula la temperatura que entra a las vías respiratorias.
En suma, y a partir de la pandemia, hemos aprendido que los cuidados contra el Covid 19 también son útiles para evitar resfríos, gripes, gastroenteritis, conjuntivitis, diarrea, influenza, hepatitis, neumonías, Síndrome Urémico Hemolítico (SUH) e infecciones de la piel, y otros virus frecuentes que suelen circular en el año, pero con más incidencia en la época invernal por la poca ventilación y las aglomeraciones.
En este sentido, mantener el uso del tapaboca en el transporte público, cines, teatros, espectáculos deportivos, por ejemplo, no está de más. También recordar la importancia de no compartir vasos, platos, cubiertos, mate, etc., con otras personas.
En la medida que cada persona tome conciencia de la importancia de estos cuidados, lleve una adecuada alimentación, descanse bien y realice actividad física, su sistema inmunológico se verá fortalecido.
Fuente: Télam