Cristian Ayala, chofer de una empresa de logística y delegado del Sindicato de Camioneros, fue imputado este miércoles y se le dictó prisión preventiva por 90 días por haber transportado la bandera que “Los Monos” mostraron en la despedida de Maxi Rodríguez en el estadio de Newell’s.
Para la justicia provincial, la exhibición del enorme telón fue un hecho de “intimidación pública”. Durante la audiencia, los fiscales Matías Edery y Luis Schiappa Pietra presentaron también un video que mostró que el presidente del club había estado el día siguiente al evento, supervisando la salida del trapo con la imagen de los jefes de la barra y de la banda narco, presos en la cárcel federal de Marcos Paz.
En las próximas semanas, de acuerdo a lo que dijo Schiappa Pietra, “si aparece evidencia que lo fundamente, podremos avanzar con más imputaciones, porque la investigación recién empieza”. En la audiencia en el Centro de Justicia Penal, él y su colega Edery ventilaron audios con diálogos entre “Guille” Cantero y Leandro “Pollo” Vinardi, dos de lo que aparecieron en la bandera. En esas charlas, en los días previos a la despedida de Maxi, hablaban sobre “terminar el trapo” y debatían sobre la conveniencia de mostrarlo ese 24 de junio.
Otro de los elementos novedosos de la causa, fue el video que presentaron los fiscales con la imagen de un auto que llega el domingo a la mañana al Coloso, justo en el momento en el que está por salir la bandera. Edery reseñó que se trataba de un vehículo a nombre del hijo de Ignacio Astore, presidente de Newell’s. Y al pasar las imágenes, indicó que los dos hombres que bajaban en ese momento para supervisar el egreso del trapo de la popular, eran justamente el mandamás leproso y su hijo.
Hasta el momento, el citado video no se dio a conocer a la prensa porque están en análisis cuáles van hacer los pasos procesales respecto del material. El último lunes, tras la publicación en RedBoing del dato que circulaba como versión dentro del club con la versión de que “un alto dirigente” había estado en el Coloso ese domingo acompañando la salida de la bandera, el propio Astore se presentó a la justicia. Fue al Centro de Justicia Penal acompañado de un abogado, para admitir su presencia esa mañana del 25 de junio en el club. En el escrito que presentó al MPA, dio una versión de lo que había hecho ese día, vinculado a las actividades habituales después de un evento importante como el que habían organizado pocas horas antes y desmintió que su presencia haya tenido alguna relación con el trapo de la barra. Ahora los fiscales deben confirmar con las imágenes que cuentan si efectivamente las cosas sucedieron así.
Cabe recordar que entre el 26 de junio y el 7 de julio, la justicia debió ir tres veces al estadio a buscar imágenes de las cámaras internas de seguridad y que por la falta de colaboración, en la última ocasión los fiscales y la AIC tuvieron que ir con una orden judicial.