La séptima audiencia por el crimen de Fernando Báez Sosa fue una de las más emotivas por los temas que se trataron.
La declaración más importante del día fue la de Pablo Laborde, secretario del Ministerio Público Fiscal y responsable de, entre otras cosas, peritar los celulares de todos los acusados por el asesinato.
En ese sentido, los mensajes hallados en tres de los teléfonos son realmente escalofriantes y dan cuenta de como vivieron el ataque los mismos acusados. El primer celular expuesto fue el de Matías Benicelli, donde se encontró el siguiente mensaje por parte de Enzo Comelli: “Estamos en la barra”.
“Vengan que estamos re instalados”, replicó Máximo Thomsen minutos después, a las 3.48 horas del 18 de enero de 2020. El siguiente registro en el grupo de WhatsApp que tenían entre los rugbiers fue un audio de Lucas Pertossi: “Estoy acá cerca de donde está el pibe y están todos ahí a los gritos, está la policía, llamaron a la ambulancia… Caducó”.
Por otro lado, en el teléfono celular de Juan Pedro Guarino, uno de los primeros sobreseídos en la causa, se encontró un chat con su novia en la que daba cuenta de lo ocurrido. “Esta noche fue rara, no me siento bien. Lo único que necesito es tenerte a vos en la vida, no dejes de hacerme el pibe más feliz del mundo”, sostuvo.
La respuesta de la joven llegó horas después, sobre el mediodía de ese mismo día, cuando le mandó un artículo periodístico que detallaba lo sucedido en Villa Gesell. “No fueron ustedes, ¿no? Estoy preocupada”, le había mandado.
Por último, también se expusieron los chats hallados en el celular de Ciro Pertossi. Allí se pudo ver cómo habló con una mujer identificada como Ana, a la que le detalló: “Nos sacaron, nos agarró la policía y nos soltaron”. Esto fue a las 5 en punto de la madrugada.
“Ciro, contestáme. Ya sé que estabas durmiendo, perdón. Machu (Thomsen) y Enzo (Comelli) mataron a un pibe”, le expresó la joven horas después. La respuesta de Pertossi, a pesar de que sus búsquedas en Google incluían “Villa Gesell pelea”, fue negar todo: “Estamos bien todos. No pasó nada, no te preocupes”.
Por otro lado, en la jornada de hoy, dos peritos confirmaron que la zapatilla que llevaba sangre de Fernando era de Máximo Thomsen. María Emilia Salamendi fue quien, para llegar a este dato, realizó las mediciones a los pies de Alejo Milanesi, Enzo Comelli, Ciro Pertossi , Juan Pedro Guarino (que fue sobreseído) y Blas Cinalli.
“Les hicimos las medidas con el pie desnudo. Se descalzó uno por uno a cada individuo y se los individualizó con una letra. Por ejemplo, a Milanesi con la letra ‘A’, su pie derecho con el número ‘1’, el izquierdo con el ‘2’ y el calzado derecho con ‘3’ y el izquierdo con ‘4’”, reveló.
Mientras que declaró también María Luján Molina, perito y licenciada en criminalística en la policía Científica de Pinamar, quien realizó las mediciones de las longitudes de los pies de cinco detenidos: Lucas Pertossi, Thomsen, Luciano Pertossi, Ayrton Viollaz y Matías Benicelli.
Ante esto, dejó en evidencia a Thomsen cuando nombró a Pablo Ventura. Resulta que el pie de Ventura mide, por lo menos, siete centímetros más de largo que el de Thomsen.
María Eugenia Cariac, integrante de la policía científica de la Policía de Buenos Aires, participó de la pericia scopométrica, a la que definió como un “estudio comparativo” entre las improntas detectadas en la autopsia de la víctima y cuatro zapatillas secuestradas en el allanamiento.
“La zapatilla de marca Cyclone que tenía un diseño ‘zigzag’” fueron los detalles que confirmaron que la impronta era del calzado que pertenece a Máximo Thomsen.