La capacitación de personal: ¿por qué es una de las claves del éxito en las organizaciones?

Actualmente, en la sociedad de la información en la que el tiempo se disipa, la globalización pone todo a disposición todo el tiempo. A este ritmo, debemos reconocer que el conocimiento tiene rápida fecha de caducidad. 

Tenemos que comprender que toda la vida vamos a estar en constante aprendizaje, por lo que el que no se capacita, queda obsoleto. Podemos concluir entonces, que la capacitación influye directamente en el valor que tiene un empleado para una empresa u organización. Para más información puede acceder aquí.

No alcanza la capacitación pasiva, donde el participante es un mero espectador, ahora se requiere un aprendizaje activo, donde los destinatarios de las capacitaciones son protagonistas de su propio proceso de educación o aprendizaje.

Una limitante es la disponibilidad del tiempo, de ahí cobran importancia distintas opciones de capacitaciones y herramientas para hacer más accesible los conocimientos, como los cursos online, las capacitaciones 2b2, las jornadas fuera del lugar de trabajo, etc. Lo bueno de estos tiempos es que hay infinitas alternativas para formarse.

Los sistemas verticales y jerárquicos fueron reemplazados, en gran medida, por los transversales que impulsan el talento. Es fundamental que todas las empresas, sin importar el rubro al que se dediquen, aprovechen el poder de la tecnología y la conviertan en una ventaja competitiva.

Marketing interno

Representa el conjunto de técnicas y estrategias que se utilizan para vender la cultura de la compañía a sus propios empleados, generando una mejora en su motivación y productividad. El marketing interno es la tarea de contratar, motivar y entrenar al personal para tratar con los clientes.

Se ha comprobado que un trabajador feliz y motivado puede rendir hasta el triple que un trabajador descontento y propenso a desertar.

Las grandes empresas implementan planes estratégicos de marketing interno por medio de directivos y recursos humanos, para conseguir mejorar el ambiente laboral, aumentar la productividad y crear un ambiente armónico entre las distintas áreas y departamentos. Algunos ejemplos de empresas que trabajan duro en la implementación del marketing interno son: Google, Coca Cola, Apple, Red Bull, Banco Santander, Disney, etc. La madurez de las empresas nombradas nos da una clara pauta de que aplicarlo produce excelentes resultados.

Los empleados son los clientes más importantes, y ellos son los primeros que deben “comprar” la compañía. Es básico en esta estrategia también, el proceso de comunicación interna, es decir, comunicación entre los distintos niveles y departamentos de la misma empresa.

Ya que será el “plan de ventas” de los directivos pero hacia los empleados para que sean fieles a la empresa. Si se analizan los mecanismos de ventas, en gran medida esta comunicación se realiza en forma de publicidad, y esta estrategia es la culpable de la mayoría de los errores e interferencias en la comunicación interna, que luego acumula fallos causando conflictos en el mediano plazo.

Lo ideal es implementar la estrategia de la comprensión en la comunicación, dando un mensaje de escucha, de estar a disposición de los empleados y ser flexibles. La clave es no hacer falsas promesas, manejarse con sinceridad, generar espacios de diálogos que sean abiertos e intentar conocer sus preocupaciones y realidades.

El objetivo es educar e instruir a los empleados en la “cultura” de la organización, empaparnos de manera que ellos puedan luego reconocer esos valores, y de esa forma transmitirlos a los clientes. Los empleados buscarán la interacción con los clientes de una forma más activa, ya que manejan otras expectativas.

El marketing interno tiene una característica única que es la ampliación de la experiencia. Una persona puede convertirse en amplificador de las experiencias con todos sus conocidos, por ejemplo, y eso es algo que se debe tener en cuenta a la hora de poner en marcha una estrategia de estas. Otra idea a transmitir, es que no basta solo con implicar individualmente a un empleado, sino que se debe lograr el trabajo conjunto, sin distinciones de área ni de jerarquía, lo que en algunas ocasiones genera problemas entre las personas, y eso causa un clima laboral tenso.

El enfoque es “el cliente más importante es el empleado”. Y esto es muy cierto, ya que ellos son los que llevan adelante día a día la operatividad de la empresa, ellos son los que la hacen crecer (o no), los que tienen contacto con los clientes, y pueden dejar impresiones negativas o positivas.

Algunos indicadores del marketing interno, según Ahmed, Rafiq y Saad (2003) para “medir” o hacer un diagnóstico situacional de la empresa antes de implementar un plan estratégico, son: 

El sentido de pertenencia:

La satisfacción o no satisfacción del individuo que se autorreconoce como perteneciente a un grupo. Implica compromiso afectivo con la empresa.

Motivación:

La capacidad que tiene la empresa de mantener implicados o interesados a sus empleados. Está comprobada la relación directa entre la motivación y el desempeño.

Comunicación:

Transmitir eficazmente esa motivación, utilizando todos los canales de comunicación. Establecer un canal que funcione, ya sea de directivos a empleados, y viceversa. Es una función clave.

Empoderamiento:

La información y los recursos en manos de los empleados los hace capaces de tomar decisiones, y esta independencia y autonomía genera un aumento y mejora en el desempeño de los recursos humanos de la organización.

Hay que enfocarse en la correcta motivación, para que los empleados puedan encontrar un sentido a esa capacitación y la vean como una herramienta para alcanzar sus objetivos y crecer.

En este sentido, hay una serie de ofertas de cursos de marketing interno, marketing digital, comunicación en el marketing, etc. Incluso hay muchísimas opciones de cursos virtuales, que representan hoy en día los métodos más nuevos de capacitación, y más utilizados, sobre todo a partir de la pandemia.

Es fundamental la retroalimentación luego del mismo, para evaluar resultados e impacto, para esto se deben implementar herramientas como pueden ser evaluaciones de desempeño, encuestas, actividades grupales o jornadas conjuntas de trabajo.