Jorge Broun: “Mi corazón siempre está en Central”

El arquero de Gimnasia y Esgrima aclaró su situación ante la búsqueda del reemplazante de Josué Ayala en Rosario Central. Además recordó a Diego Maradona.

Es difícil cuando los colores tiran, o cuando el primer amor llama y comienzan a pasar los recuerdos de los momentos vividos, así le pasa a Jorge “Fatura” Broun, arquero de Gimnasia y Esgrima La Plata quien habló sobre la chance de reemplazar a Josué Ayala.

“Mi corazón siempre está en Central pero también le tengo un respeto muy grande a los directivos de Gimnasia por todo lo que me brindaron este último año” dijo Fatura.

Difícil desde los papeles

Desde lo contractual la situación no es sencilla para salir del Lobo dónde se transformó en un referente y en un pieza muy importante del equipo platense, de esta manera el arquero muestra incertidumbre; “realmente no sé, tengo contrato en Gimnasia dónde me trataron muy bien desde mi vuelta de Europa, no depende 100% de mí”.

Fue imposible gambetear el tema que aún sacude al mundo, la muerte de Diego Maradona, su ex entrenador. “Todavía uno no cae, sigue latente, en su momento estuve muy triste, de a poco voy saliendo y siento que fue un lindo desahogo el fin de semana, un antes y un después, para la mayoría de los muchachos en el vestuario fue una mezcla de todo, alegría y tristeza”.

“Para mí estar al lado de Maradona fue un crecimiento personal, el grupo está bien, con posibilidades todavía de clasificar a la ronda campeonato que era nuestro objetivo cuando arrancamos todo esto” agregó Broun sobre la presencia tan cercana al astro mundial.

En charla con “Zapping Sport” por Radio 2 contó como nació tan buena relación. “Con Maradona éramos dos locos lindos, sabiendo que había jugado en Newell’s, lo encaré por ese lado, del clásico, conociendo que yo había jugado en Central. Fue él quien me permitió acercarme, bromear con eso, y abrirse al cariño que uno tenía. Me quedo con haberlo hecho divertir un tiempo y la tranquilidad de habernos dicho que nos queríamos”.

La última imagen que tuvo de “Diego” lo ilusionó con una vuelta rápida que nunca llegó. “Lo notamos muy bien en esa videollamada, bien de ánimo, con ganas de volver a los entrenamientos y cuando cortamos la llamada nos miramos y pensamos que es un robot, que tiene un físico privilegiado desde la última imagen que había dejado en el partido con Patronato estaba totalmente distinto”.