Fandermole recordó a Lalo De los Santos, el creador del mítico “Tema de Rosario”

Se cumplen 20 años del fallecimiento del compositor y parte fundamental de la Trova Rosarina. Su amigo y colega Jorge Fandermole le dedicó unas palabras.

Hace 20 años que se fue Lalo De los Santos, apenas una semana después de que tocáramos juntos por última vez con Rosarinos en su ciudad, la que lleva su canción como una insignia.

No es la fecha de una partida algo que me interese especialmente recordar, porque tiene una remitencia dolorosa; sin embargo nuestra tradición se encarga de que la tengamos a la vista en primer plano siempre, y así quizá, olvidemos otras más importantes.

Prefiero recordar que Lalo nació hace 65 años, dos días después que yo; que no supimos nada el uno del otro hasta pasada la adolescencia, y que luego fue para mí un nombre ligado a una música que me conmovía, a un grupo de creadores poderosos.

Prefiero recordar que más tarde pudimos conocernos y compartir un tramo de música y de existencia, y que en ese tiempo su cercanía fue para mí serena y amable, de esas que no tienen rincones ásperos, sino toda la abundancia generosa de un músico capaz de recordar y tocar cualquier tema del mundo, instantáneamente, como sacándolo de una galera.

Por eso y muchas otras cosas, y no precisamente por ser el aniversario de su muerte, sino con la intermitencia con la que él aparece en mi propio recuerdo, celebro la vida de Lalo de los Santos y las buenas cosas que dejó en el mundo, y agradezco haber compartido un trecho con él, ya que de ese camino también estoy hecho, afortunadamente.

TEMA DE ROSARIO  LALO DE LOS SANTOS

Músico, compositor, arreglador y cantante: Fue uno de los grandes

Lalo De los Santos fue uno de los batalladores por impulsar la música de Rosario, ciudad a la que le regaló su canción insignia. “Tema de Rosario”.

Nacido como Eduardo De los Santos  el 17 de enero de 1956, ya convertido en Lalo aportó su enorme sensibilidad al crisol musical que irrumpió a inicios de los ’80 de la mano de la denominada Trova Rosarina.

Pero antes, desde marzo de 1973, fue parte del Ateneo Músicos y Amigos de Rosario (AMAdeR) y luego se integró a la mítica banda de rock sinfónico Pablo el enterrador.

Luego de mudarse a Buenos Aires y con la tutela de Lito Nebbia lanzó su primer álbum “Al final de cada día” (con canciones como “Para la gente de barrio”, “Al maestro con música”, “El Káiser”, “Goldianía” y, claro, “Tema de Rosario”); al que le siguió “Hay otro cielo” (1987), otra vez bajo la batuta de Nebbia, donde destacaban “No te caigas campeón” y “Tibio brote de amor”, entre otras piezas.

Su tercer y último disco solitario fue “Canciones rosarinas” (1996), donde reunió piezas de sus dos primeras placas y estrenó “Aquella niña en soledad” (dedicada a Silvina Garré) y “Vuela Aldo vuela” (donde exhibió una vez más su desbordada pasión por Rosario Central y por el goleador Aldo Pedro Poy).

Poco tiempo después le descubrieron un tumor en el fémur de una de sus piernas y aunque enfrentó con energía ese trance –con operaciones y tratamientos-, finalmente falleció el 25 de marzo de 2001.

Fuente: Télam