La rutina, el tráfico, las obligaciones diarias... A veces no hace falta esperar las vacaciones para tomarse un respiro. Las escapadas urbanas se convirtieron en la solución ideal para quienes buscan cambiar de aire sin alejarse demasiado. Un paseo por los barrios porteños seguido de una escapada a Mar del Plata puede ser el plan perfecto para un fin de semana largo o incluso para un simple corte en la semana.
En los últimos años, la idea de desconectarse por unos días ganó popularidad entre quienes viven en grandes ciudades. No se trata de hacer un gran viaje, sino de aprovechar lo que está cerca. Buenos Aires ofrece una infinidad de rincones para recorrer: desde los pasajes escondidos de San Telmo hasta los murales de Colegiales, pasando por los parques de Palermo o los cafés literarios de Almagro. Una mañana de sábado se puede transformar en una experiencia distinta si nos proponemos mirar la ciudad con ojos de turista.
Pero si la necesidad de mar y horizonte se hace presente, hay una opción que nunca falla: Mar del Plata. A solo cinco horas en auto desde la Ciudad de Buenos Aires (o mucho menos si se elige avión o tren), la costa marplatense es una escapada accesible y con todo lo necesario para recargar energías. Las playas, los paseos costeros, la gastronomía marina y el aire salado invitan a soltar el estrés y relajarse, aunque sea por un par de días.
Una de las grandes ventajas para quienes eligen Mar del Plata en este tipo de viajes cortos es la facilidad para encontrar opciones de alojamiento flexibles. Hoy en día, los alquileres temporarios en Mar del Plata son una alternativa cómoda y adaptable a cada tipo de viajero. Desde parejas que buscan un lugar íntimo hasta grupos de amigos que prefieren algo más amplio, hay soluciones para todos los gustos. Lo importante es evitar la rigidez de los formatos tradicionales y optar por una estadía que se sienta como en casa.
Además, el turismo de fin de semana no necesita de grandes planes. A veces, caminar por la rambla, tomar un café mirando el mar o recorrer las ferias de artesanías ya son suficientes para renovar el ánimo. La clave está en el contraste: pasar de la ciudad al mar en pocas horas nos ayuda a salir de la rutina sin necesidad de organizar un viaje complejo.
Estas escapadas urbanas son ideales para quienes quieren vivir nuevas experiencias sin tomarse días de vacaciones. Se pueden planificar con poca anticipación, ajustar al bolsillo y combinar con actividades culturales, gastronómicas o simplemente de descanso.
En definitiva, ya sea para aprovechar un feriado o improvisar una salida, combinar un paseo por Buenos Aires con unos días en la costa marplatense puede ser la dosis justa de bienestar. Y con la ayuda de los alquileres temporarios en Mar del Plata, ese plan está más al alcance que nunca.