El coche, conocido en algunos mercados como Vento o Bora, alcanzó una velocidad de 300 kilómetros por hora
Volkswagen batió esta semana el récord del mundo de velocidad con un Jetta Hybrid de pruebas, para vehículos de menos de 1,5 litros de cilindrada.
El lugar del acontecimiento fue en las legendarias salinas del antiguo lago Bonneville, en el estado federal de Utah, Estados Unidos. Legendarias porque aquí se rompieron muchos de los grandes récords del mundo de velocidad.
El vehículo de pruebas con una potencia incrementada batió, con una máxima de 301,18 km/h, la mágica marca de los 300 km/h como primer vehículo híbrido de su categoría.
El récord de velocidad, en este caso el «H/PS land speed record» de la asociación de cronometraje de California del Sur (SCTA, Southern California Timing Association), se registra con la media entre un recorrido de ida y uno de vuelta. El Jetta hybrid alcanzó una velocidad de 299,84 km/h, que también es el valor máximo alcanzado por un vehículo híbrido de esta categoría de cilindrada. Con ello, el Jetta Hybrid mejoró su propio récord de agosto de 2012 en aproximadamente 30 km/h.
El Jetta Hybrid en la versión de producción en serie, es propulsado por un potente motor TSI de 110 kW / 150 CV (inyección directa de gasolina turbopropulsado con 1.395 cm3 de cilindrada) y un motor eléctrico de 20 kW. La potencia del sistema se sitúa en 170 CV. Esta potencia se incrementó para el récord de velocidad hasta aproximadamente 300 CV. En el eje delantero, la energía de propulsión se aplica a través de una caja de doble embrague (DSG) de 7 velocidades.
Para batir el récord, el Volkswagen se equipó con un chasis deportivo modificado, una carrocería rebajada, neumáticos especiales para carreras sobre sal, sistema antivuelco, asiento tipo backet con cinturón de seguridad de cinco puntos de anclaje y un sistema de extinción de incendios.
Debido a su pronunciación (yeta) en algunos mercados hispanoparlantes se lo conoce como Vento y en otros como Bora.

Imágenes: Volkswagen