En sólo tres años, Uruguay pasó de tener el 1% de generación de energía eólica a un 22% del total de la electricidad generada.
Así lo indicó este jueves el presidente de la empresa estatal UTE, quien adelantó el interés de inversores extranjeros por participar de obras que el ente prevé para los próximos tres años en producción, distribución y transmisión por unos 1.000 millones de dólares.
“Uruguay se destaca por el dinamismo en la generación eléctrica: en tres años pasó del 1% a un 22% de eólica”, sostuvo el presidente de UTE, Gonzalo Casaravilla. El directivo también adelantó que ese porcentaje crecerá a un 31% para 2017.
En particular, y a los efectos de ilustrar las inversiones realizadas, insistió en que en estos tres años se habrán instalado un total del orden de 1.300 megavatios (MW) de aerogeneradores y en 2017 se instalarán los últimos 180 MW previstos en esta primer etapa del cambio de la matriz eléctrica de generación, llegando al orden de 1500 MW instalados a fines de 2017.